Crónica viaje a Villarreal
El viaje hacia Villareal fue desde diversos puntos de España. Desde Barcelona bajó Luisfe con Rafa, un peñista de Juan Andante, desde Madrid en coche Curro Cervera y desde Sevilla en avión David Rubio, Pepelu, Ana y un servidor (Fede Barrero).
El viaje comenzó temprano pues el vuelo salía a las 9, y como primera anécdota decir que Curro Cervera que debía recogernos en coche en el aeropuerto de Valencia se quedó dormido y tuvimos que despertarlo a base de 2 horas de llamada telefónicas. La ida fue agradable y tras esperar en el aeropuerto a que nos recogieran más de una hora debido a que se le pegaron las sábanas al madrileño (tiempo que utilizamos para desayunar y comprar un décimo de lotería, por si acaso) fuimos dirección a Villarreal.
El pueblo está cerca de Valencia, tardamos un poco más pues tuvimos que parar ya que las dos jarras de cervezas que tomamos Pepelu y yo surtieron efecto. Una vez allí, nos fuimos directamente al hotel de los jugadores. ¡Teníamos recepción con D.Miguel Guillen!. Una vez allí, nuestro peñista David a través de un contacto habló con el presi, que bajó y nos invito a varias cervezas en la cafetería. Estuvo con nosotros hasta que vinieron a recogerlos Pardezas y Fernando Roig hijo para la comida de directivas. En esa charla se fueron uniendo Gordillo y los periodistas Carlos Bellver y otro periodista del Diario de Sevilla.
La charla fue muy amena, ay que nos contaba varias anécdotas de antes de su mandato y durante el mandato. Todo ello lo amenizó con comentarios siempre bromistas Carlos Bellver y el tiempo se nos pasó volando. Nos hicimos las fotos pertinentes y le entregamos una camiseta de la peña al Presidente Guillen que prometió ponérsela (suponemos que de pijama, porque para otra cosa…no lo vemos).
Nos fuimos posteriormente a los aledaños para comer, allí se unió Luisfe con 3 amigos más. El bar estaba lleno de béticos que no paramos de cantar, hubo hasta sevillanas verdiblancas interpretadas por nuestro peñista David Rubio y bailadas por varias parejas, entre ellas Ana. La cosa se fue animando en el botellón, ahí sacamos la pancarta y se unieron todo el que quiso. Vinieron los padres de Isidoro a hacerse una foto con nosotros, nos enseñaron la casa donde vivía Rossi (nada del otro mundo, aquello daba la impresión de ser lo que era, un pueblucho.) y una vez llegada la hora nos dirigimos al estadio.
Del partido poco que contaros, no da la cosa para mucho, y tras la decepción del resultado y del juego volvimos para valencia donde teníamos el hostal. La noche allí no fue muy intensa pues la moral no ayudaba, cenamos y bebimos varias copas. Los que más dieron la cara fueron Curro Cervera y Pepelu. La noche le salió redonda y estuvo llena de anécdotas como por ejemplo que nada más bajar del hostal empezó a orinar en la calle y la policía lo pilló. Imaginarse como iba que hasta se puso a buscar una cadena para tirar de la cisterna!!. La noche siguió (con la correspondiente multa puesta) hasta tal punto de que también perdió el ticket del guardarropas de la discoteca y ¡No se acordaba cual era su chaquetón!, lo que produjo que tuviera que esperar hasta las 7 de la mañana a que cerrara y ver cual era el que sobraba para llevárselo.
Pepelu de esa noche tiene muchas lagunas (tantas que no se acuerda de nada), llegó hasta desaparecer el décimo de lotería comprado, pero se encontró, igual que no encontramos desnudos tanto a Curro como a Pepelu en la cama, la borrachera no le dio ni para ponerse el pijama.
La vuelta, algo accidentada, deja poco que contar. Curro nos dejó en el aeropuerto y el siguió para Madrid. Allí tuvimos la gran noticia que nuestro vuelo se retrasaba, tanto que pasamos la tarde allí como pudimos y llegamos a Sevilla a las 8.30 (no pudimos votar¡¡).
Aún así y viendo el resultado como decía Carlos Bellver. “Los béticos siempre nos quedamos con lo positivo, con las experiencias vividas, las anécdotas y las personas y personajes conocidos en cada viaje” pues eso mismo. Un saludo a todos los desplazados.
VIVA EL BETIS Y VIVA LA PEÑA BÉTICA LA ESQUINITA¡¡
El viaje hacia Villareal fue desde diversos puntos de España. Desde Barcelona bajó Luisfe con Rafa, un peñista de Juan Andante, desde Madrid en coche Curro Cervera y desde Sevilla en avión David Rubio, Pepelu, Ana y un servidor (Fede Barrero).
El viaje comenzó temprano pues el vuelo salía a las 9, y como primera anécdota decir que Curro Cervera que debía recogernos en coche en el aeropuerto de Valencia se quedó dormido y tuvimos que despertarlo a base de 2 horas de llamada telefónicas. La ida fue agradable y tras esperar en el aeropuerto a que nos recogieran más de una hora debido a que se le pegaron las sábanas al madrileño (tiempo que utilizamos para desayunar y comprar un décimo de lotería, por si acaso) fuimos dirección a Villarreal.
El pueblo está cerca de Valencia, tardamos un poco más pues tuvimos que parar ya que las dos jarras de cervezas que tomamos Pepelu y yo surtieron efecto. Una vez allí, nos fuimos directamente al hotel de los jugadores. ¡Teníamos recepción con D.Miguel Guillen!. Una vez allí, nuestro peñista David a través de un contacto habló con el presi, que bajó y nos invito a varias cervezas en la cafetería. Estuvo con nosotros hasta que vinieron a recogerlos Pardezas y Fernando Roig hijo para la comida de directivas. En esa charla se fueron uniendo Gordillo y los periodistas Carlos Bellver y otro periodista del Diario de Sevilla.
La charla fue muy amena, ay que nos contaba varias anécdotas de antes de su mandato y durante el mandato. Todo ello lo amenizó con comentarios siempre bromistas Carlos Bellver y el tiempo se nos pasó volando. Nos hicimos las fotos pertinentes y le entregamos una camiseta de la peña al Presidente Guillen que prometió ponérsela (suponemos que de pijama, porque para otra cosa…no lo vemos).
Nos fuimos posteriormente a los aledaños para comer, allí se unió Luisfe con 3 amigos más. El bar estaba lleno de béticos que no paramos de cantar, hubo hasta sevillanas verdiblancas interpretadas por nuestro peñista David Rubio y bailadas por varias parejas, entre ellas Ana. La cosa se fue animando en el botellón, ahí sacamos la pancarta y se unieron todo el que quiso. Vinieron los padres de Isidoro a hacerse una foto con nosotros, nos enseñaron la casa donde vivía Rossi (nada del otro mundo, aquello daba la impresión de ser lo que era, un pueblucho.) y una vez llegada la hora nos dirigimos al estadio.
Del partido poco que contaros, no da la cosa para mucho, y tras la decepción del resultado y del juego volvimos para valencia donde teníamos el hostal. La noche allí no fue muy intensa pues la moral no ayudaba, cenamos y bebimos varias copas. Los que más dieron la cara fueron Curro Cervera y Pepelu. La noche le salió redonda y estuvo llena de anécdotas como por ejemplo que nada más bajar del hostal empezó a orinar en la calle y la policía lo pilló. Imaginarse como iba que hasta se puso a buscar una cadena para tirar de la cisterna!!. La noche siguió (con la correspondiente multa puesta) hasta tal punto de que también perdió el ticket del guardarropas de la discoteca y ¡No se acordaba cual era su chaquetón!, lo que produjo que tuviera que esperar hasta las 7 de la mañana a que cerrara y ver cual era el que sobraba para llevárselo.
Pepelu de esa noche tiene muchas lagunas (tantas que no se acuerda de nada), llegó hasta desaparecer el décimo de lotería comprado, pero se encontró, igual que no encontramos desnudos tanto a Curro como a Pepelu en la cama, la borrachera no le dio ni para ponerse el pijama.
La vuelta, algo accidentada, deja poco que contar. Curro nos dejó en el aeropuerto y el siguió para Madrid. Allí tuvimos la gran noticia que nuestro vuelo se retrasaba, tanto que pasamos la tarde allí como pudimos y llegamos a Sevilla a las 8.30 (no pudimos votar¡¡).
Aún así y viendo el resultado como decía Carlos Bellver. “Los béticos siempre nos quedamos con lo positivo, con las experiencias vividas, las anécdotas y las personas y personajes conocidos en cada viaje” pues eso mismo. Un saludo a todos los desplazados.
VIVA EL BETIS Y VIVA LA PEÑA BÉTICA LA ESQUINITA¡¡
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