Crónica viaje a Villarreal

El viaje hacia Villareal fue desde diversos puntos de España. Desde Barcelona bajó Luisfe con Rafa, un peñista de Juan Andante, desde Madrid en coche Curro Cervera y desde Sevilla en avión David Rubio, Pepelu, Ana y un servidor (Fede Barrero).

El viaje comenzó temprano pues el vuelo salía a las 9, y como primera anécdota decir que Curro Cervera que debía recogernos en coche en el aeropuerto de Valencia se quedó dormido y tuvimos que despertarlo a base de 2 horas de llamada telefónicas. La ida fue agradable y tras esperar en el aeropuerto a que nos recogieran más de una hora debido a que se le pegaron las sábanas al madrileño (tiempo que utilizamos para desayunar y comprar un décimo de lotería, por si acaso) fuimos dirección a Villarreal.

El pueblo está cerca de Valencia, tardamos un poco más pues tuvimos que parar ya que las dos jarras de cervezas que tomamos Pepelu y yo surtieron efecto. Una vez allí, nos fuimos directamente al hotel de los jugadores. ¡Teníamos recepción con D.Miguel Guillen!. Una vez allí, nuestro peñista David a través de un contacto habló con el presi, que bajó y nos invito a varias cervezas en la cafetería. Estuvo con nosotros hasta que vinieron a recogerlos Pardezas y Fernando Roig hijo para la comida de directivas. En esa charla se fueron uniendo Gordillo y los periodistas Carlos Bellver y otro periodista del Diario de Sevilla.

La charla fue muy amena, ay que nos contaba varias anécdotas de antes de su mandato y durante el mandato. Todo ello lo amenizó con comentarios siempre bromistas Carlos Bellver y el tiempo se nos pasó volando. Nos hicimos las fotos pertinentes y le entregamos una camiseta de la peña al Presidente Guillen que prometió ponérsela (suponemos que de pijama, porque para otra cosa…no lo vemos).

Nos fuimos posteriormente a los aledaños para comer, allí se unió Luisfe con 3 amigos más. El bar estaba lleno de béticos que no paramos de cantar, hubo hasta sevillanas verdiblancas interpretadas por nuestro peñista David Rubio y bailadas por varias parejas, entre ellas Ana. La cosa se fue animando en el botellón, ahí sacamos la pancarta y se unieron todo el que quiso. Vinieron los padres de Isidoro a hacerse una foto con nosotros, nos enseñaron la casa donde vivía Rossi (nada del otro mundo, aquello daba la impresión de ser lo que era, un pueblucho.) y una vez llegada la hora nos dirigimos al estadio.

Del partido poco que contaros, no da la cosa para mucho, y tras la decepción del resultado y del juego volvimos para valencia donde teníamos el hostal. La noche allí no fue muy intensa pues la moral no ayudaba, cenamos y bebimos varias copas. Los que más dieron la cara fueron Curro Cervera y Pepelu. La noche le salió redonda y estuvo llena de anécdotas como por ejemplo que nada más bajar del hostal empezó a orinar en la calle y la policía lo pilló. Imaginarse como iba que hasta se puso a buscar una cadena para tirar de la cisterna!!. La noche siguió (con la correspondiente multa puesta) hasta tal punto de que también perdió el ticket del guardarropas de la discoteca y ¡No se acordaba cual era su chaquetón!, lo que produjo que tuviera que esperar hasta las 7 de la mañana a que cerrara y ver cual era el que sobraba para llevárselo.

Pepelu de esa noche tiene muchas lagunas (tantas que no se acuerda de nada), llegó hasta desaparecer el décimo de lotería comprado, pero se encontró, igual que no encontramos desnudos tanto a Curro como a Pepelu en la cama, la borrachera no le dio ni para ponerse el pijama.

La vuelta, algo accidentada, deja poco que contar. Curro nos dejó en el aeropuerto y el siguió para Madrid. Allí tuvimos la gran noticia que nuestro vuelo se retrasaba, tanto que pasamos la tarde allí como pudimos y llegamos a Sevilla a las 8.30 (no pudimos votar¡¡).

Aún así y viendo el resultado como decía Carlos Bellver. “Los béticos siempre nos quedamos con lo positivo, con las experiencias vividas, las anécdotas y las personas y personajes conocidos en cada viaje” pues eso mismo. Un saludo a todos los desplazados.

VIVA EL BETIS Y VIVA LA PEÑA BÉTICA LA ESQUINITA¡¡

CRÓNICA RACING - BETIS

Aunque fuimos 6 los peñistas desplazados a los Campos de Sport del sardinero, (un número importante teniendo en cuenta la distancia entre Santander y Sevilla, y que el equipo no anda precisamente en su mejor momento) casi todos fuimos en grupos separados. Nacho Ollero y Pablo Martínez fueron en coche desde Sepúlveda donde estaban pasando el puente, Fede Barrero y su novia Marta fueron en avión desde Sevilla y Luife, Ana y un servidor (Paco Cuevas) fueron en avión desde Barcelona donde habíamos asistido a la derrota del Betis en Cornellà-El Prat.
El grueso del grupo llegó a Santander el sábado y a eso de las 11.30 de la noche ya cayeron los primeros cubatas en un bar de la zona de marcha de Santander (plaza de Cañadio). Allí nos juntamos Fede Barrero con su novia, Luife, Ana, Paco, Pepecho de la Peña Juan Andante y algún que otro bético más. Por cierto, grandísima noche aquella y grandísima borrachera que se pilló el personal. Lo más destacado de la noche quizás fuera una conversación que tuvimos con tío de allí bastante aficionado al Racing. Resulta que allí todo el mundo sabe que el famoso partido Racing-Betis en el que conseguimos salvarnos, estaba comprado por Lopera. Por lo visto allí es Vox-populi… De ahí a que Luis Fernández y otro jugador más del Racing se negaran jugar ese partido. En fin…quien sabe.
Al día siguiente el plan era claro. Irnos a comer por ahí, echar un previo (con sul lote como Dios manda) en los aledaños y entrar al futbol lo más mamados que pudiéramos previendo que el partido iba a ser regulero… Dicho y hecho. Gracias a Juan y María (amigos míos que viven en Santander) y a Patri (amiga de ellos) que nos llevaron a comer a un bar cerca del faro de Santander, desde donde se veía toda la bahía y unos acantilados. Unas vistas preciosas y la comida muy buena. Por cierto, comentar que el bar era el “Casa Pepe” del cantábrico, con bastantes cuadros y adornos de la España Franquista… Se ve que su dueño es otro de los nostálgicos del Régimen que aún abundan por esa parte de España…Fachander!. Con el estomago lleno bajamos ya a la ciudad y nos echamos el clásico botellón en los aledaños. Cayeron varias copitas y algún que otro cántico, y para dentro. Sin duda alguna, la anécdota del viaje fue que entrando en el Sardinero, nos encontramos a Miguel Ángel Revilla, ex presidente de la Comunidad Antónoma de Cantabria. Cuando lo vimos, rápidamente nos acercamos y al grito de “presidente, una foto” nos fuimos a hacer una foto con él. Su primera reacción fue la de intentar vendernos lotería. Luego se dio cuenta de que éramos unos tiesos y no sólo se hizo una foto con nosotros, sino que también nos regaló un puro Habano (bastante bueno por cierto). “Te lo regalo porque sois andaluces y porque Sevilla es la ciudad más bonita que hay en España”. Esas fueron sus palabras cuando me lo dio.
Del partido, qué decir. Otra derrota más ante un rival directo, y lo que es peor, la sensación de que Pepe Mel está un poco perdido. Parece que no sabe ya que hacer para sacar el equipo adelante. El Betis no jugó a nada y se vió superado por un Racing que está cortito con sifón.
Con la derrota bajo el brazo, nos volvimos para el centro a seguir de cervezas y a cenar algo. La mayoría se acostó prontito aunque hubo quién se animó y salió a todo lo que da…
Nada más, un saludo a toda la PEÑA, en especial a los que desafiando los kilómetros nos encajamos en Cantabria, y también a nuestros amigos Juan, María y Patri que sin ellos el viaje no hubiera sido lo mismo. Gracias y aquí tenéis vuestra casa.
MUCHO BETIS.

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CRONICA ATHLETIC-BETIS 18/09/2011____

El viaje de cabo a rabo (el del león que nosotros nos comimos y los “cerdillistas” no pudieron) para la mayoría carecía de sentido debido al enorme kilometraje. Fue a muchos a los que les propusimos el plan y solo aceptaron o pudieron finalmente 3 más un servidor. Fueron tantas las vueltas que le dimos al tema, que hasta el sábado a la 1 de la mañana no estaba segura nuestra aventura. Solo con unas llamadas de última hora perdimos el miedo y decidimos hacerlo.

El plan era salir a las 10am con destino Bilbao, pero como no nos decidimos hasta última hora pues no nos pusimos en la carretera hasta las 11.45 de la mañana. El viaje transcurrió, aunque no se lo crean, rápido, muy rápido. Y cuando lean esta frase la tendrán que releer 5 veces y aún así no se lo creerán, pero llegamos a Bilbao a las 18.30 pm. por lo que si hacen la cuenta, desde que salí de mi portal hasta que me pisé suelo bilbaíno pasaron solo 6 horas y 45 minutos. El viaje lo amenizamos -como sabréis muchos a través del chat de la Peña en la Blackberry- con CD´s de Semana Santa, fotos de las ciudades o estadios por donde pasábamos, videos absurdos y demás. La expedición la formábamos Nacho Ollero, Carlos Rubio y yo (Fede Barrero) más Curro Cervera que iba por su cuenta desde Madrid.

Cuando llegamos allí fuimos directos al hotel de concentración y tras tantear el terreno y mandar fotos al presi de la peña para que se lo creyera (aun así nos insistió en que quería fotos fuera y dentro del estadio) nos dirigimos al museo Guggenheim para reunirnos con el otro peñista, Curro Cervera. Una vez los cuatro, nos hicimos más fotos y volvimos al hotel para despedir a los jugadores. Todos al que paramos se hicieron fotos sin ninguna queja. Unos se fueron para Iriney, otros Molina, yo saludé a Pozuelo y charlé un rato con el (es amigo mío) y estaba nervioso por poder debutar. Patricia la psicóloga se hizo fotos con los 4 al igual que Pepe Mel.

Debo hacer un punto y aparte en la anécdota del viaje. Estábamos en un puente del arquitecto Calatrava muy bonito haciéndonos fotos con el Guggenheim detrás para enviárosla u paramos a un señor mayor para que nos la hiciera. El hombre amablemente acepto diciendo que a ver si atinaba porque su mujer le dice que es muy torpe y que no sabía hacerla. Cuando nos la hizo, dijo que la comprobáramos y al dar nuestra aceptación soltó “Anda pues encima podréis decir que la foto os la hizo el que construyó el museo”. Imaginaros la cara de gilipollas que se nos quedó cuando descubrimos quien era, el arquitecto Frank Gehry, para el que no lo conozcáis mirarlo en Wikipedia y veréis la de edificios y premios que tiene. Y el tío se fue tan chulo saludando y riéndose.

Por último nos fuimos al estadio camuflados ya que las pintas de los vascos daban miedo, pero viendo que había más béticos con camisetas y banderas poco a poco fuimos sacando las nuestras y nos hicimos fotos delante de los estadios solos y mezclados con bilbaínos. El ambiente era bueno, aunque nosotros no terminamos de sentirnos a gusto y mantuvimos las distancias.

Mi entrada era en otro sitio que los otros 3 pero hablando con el encargado me dejo pasar sin problemas, la gente muy amable. Nos colocaron en un palco para prensa con su televisor pero cuando empezó el partido preferimos mezclarnos con la afición y nos sentamos cerca del palco, rodeados de bilbaínos a los cuales poco a poco nos ganamos su confianza y al final del encuentro charlaban con nosotros de manera muy distendida.

Del partido que contaros, empezamos muy bien, tragándonos los gritos de gol por dentro ya que nos miraban todos con caras de pocos amigos y nos limitamos a saltar y abrazarnos casi callados, la verdad que nos costó, era algo impotente. Parecía increíble el resultado, fallamos muchísimo. La gente está ya muy quemada de Bielsa, lástima que el Sevilla no lo fichará, y aun así y como nos temíamos (nos acordamos de aquel 3-0 que nos remontaron) terminamos pidiendo la hora. El estadio impresiona muchísimo, estaba casi lleno y la acústica es brutal. La gente no animó nada excepto al final presionando al árbitro, cosa que nos achantó bastante y estábamos los 4 fatal de los nervios. Parecía las sensaciones de un derby y veíamos que nos empataban, hablamos seriamente de irnos los últimos minutos (mi primo Curro de echo se fue) aunque aguantamos como pudimos.

Al final muy contentos, aquí ya no pudimos reprimirnos la alegría y saltamos gritando. La salida del estadio si la hicimos camuflados pues vimos a varios aficionado increpando a varios béticos y encarándose, por lo que quisimos evitar peleas. La vuelta fue más dura, sobre todo la última hora y media (se ha hecho eterna) aunque felizmente llegamos a Sevilla a las 8 de la mañana, lo justo para a mí, que tenía que trabajar el lunes, me diera tiempo de ducharme e irme al curro.

Viendo todo, no me cabe la menor duda de que mereció la pena 100%, algunos de los que me dijeron no, me reconocieron su arrepentimiento, y más con el partidazo vivido.
Algunos nos dirán locos, ¿Pero eso como se mide?, otros que no mereció la pena, ¿Pero ellos estuvieron allí?, otros que es una temeridad, ¿Cuándo se hace algo plenamente convencido no se piensa en eso. La conclusión a la que llegamos es que todo eso se dice porque teníais una parte que quería venir…os ganó la parte negativa…una pena.
Nada más un saludo a toda la PEÑA y a los desplazados (Nacho Ollero, Carlos Rubio, mi primo Curro y un servidor). Un saludo muy especial a Miki Roda, que nos ayudó en todo lo que pudo. Sin él, este viaje no hubiera sido el mismo.
MUCHO BETIS!!

Fede Barrero

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VIAJE A JEREZ______________________

Jerez era destino obligatorio para la PEÑA, tanto por cercanía como por todo lo que el equipo se está jugando en este tramo final de liga. La expedición partió desde Sevilla el mismo domingo del partido a eso de las 10:30 y estuvo formada por los peñistas Antonio Herrera, Julito, Julio Caballero y un servidor, Paco Cuevas. La idea era llegar a Jerez justo a la hora del partido, para evitar tener allí el más mínimo problema con la afición local, que ya sabíamos que no son muy amigables con nuestro equipo y que el partidom estaba declarado de alto riesgo. Así que dicho y hecho. Llegamos a Jerez sobre las 11:15 y tras un rápido desayuno, nos metimos en el Estadio de Chapín, eso sí con las bufandas y banderas guardadas ya que al llegar a Jerez, la policía nos había comentado que tuviéramos ojo porque ya se había “liado” entre la dos aficiones…
Una vez dentro colgamos la pancarta en un lugar bastante visible (de hecho se pudo ver más tarde por TV) y nos colocamos en un sitio donde daba la sombra, ya que pegaba bastante el Lorenzo. Nada más entrar pudimos darnos cuenta del odio y la enemistad que la afición del Jerez tiene a nuestro equipo. De hecho, parecen más una sucursal del otro equipo de nuestra ciudad que la afición del Jerez. Para los que hayáis estado alguna vez en un derby, la sensación nuestra allí era parecida a la de estar en la pocilga. Banderas zevillistas por todos lados, cánticos a favor del zevilla, en contra de nuestro equipo, pancartas de peñas zevillistas….un auténtico pasote. Tanto fue así, que la única vez que cantaron algo en apoyo de ¿su equipo? fue tras el gol que los puso por delante en el marcador…
De nuestra afición, sin duda la mejor y más leal “del sur de Europa” qué decir... Otro desplazamiento multitudinario. Esta vez había alrededor de 3.000 béticos en las gradas del nuevo Chapín. Gracias a dios, esta vez el equipo si cumplió para alegría del personal. Gran partido del Glorioso que en 10 minutos de brillantez solventó una difícil papeleta en un campo difícil y ante una afición hostil.
Una vez acaba la partida, y tras estar retenidos un ratillo por la policía, salimos del estadio hacia el coche rumbo al Puerto de Sta. María, para pasar la tarde en la playa, donde estuvimos hasta las 6:30 de la tarde…hora en la que nos volvimos a Sevilla con la alegría propia de haber sumado unos 3 puntos importantísimos para el ascenso, ante un rival odioso. Nada más un saludo a los peñistas desplazados y al resto de la afición bética que estuvo presente en Chapín.
PACO CUEVAS.

VIAJE A VALLECAS_______________________________

No quedará en el recuerdo de los presentes este viaje, más aun en los que nos desplazamos el mismo día del partido, en una especie de viaje relámpago… Pero haciendo noche en Madrid.

El grueso de los peñistas presentes en Vallecas (Nacho Ollero, Pablo Martínez y Rafa Nieto) partimos desde Sevilla el domingo. Salida programada para las 13:00 pero la incompetencia y las chapuzas de Goldcar hizo que finalmente pusiéramos rumbo a la capital sobre las 14:30. Le tocaba a Nacho Ollero, magnífico conductor, dar un golpe sobre la mesa y demostrar que tiene sitio en la parrilla de salida de la Fórmula Uno. Así fue. En poco más de 4 horas, parada para comer incluida, nos encajamos en el barrio de Vallecas los tres citados más un acompañante en el viaje, Pipo, cuñado de Nacho Ollero. Felicitaciones al conductor como no podía ser de otro modo.

Una vez aparcado el coche, nos dispusimos a “disfrutar” de un previo de dos horas. No vimos nada raro por Vallecas, más que la propia gente que habita en un barrio obrero como este. Muchas melenas masculinas y mucho merchandaising rayista acompañado de alguna bandera republicana o revolucionaria, pero nada hostil. Sí que nos llamó la atención que dos horas antes de un partido declarado de alto riesgo la presencia policial fuera muy escasa.

Nos metimos en un bar con aparente buena pinta y allí que nos pusimos a tertuliar sobre el Glorioso cerveza en mano. Estaba lleno de rayistas pero al haber también béticos, pues pensamos que era el lugar idóneo para beber antes del partido. Craso error, estábamos en la boca del lobo, y nosotros sin saberlo.

La lluvia que nos recibió dio una tregua al rato de estar en el bar, por lo que decidimos salir a la puerta del mismo a tomar el aire y a meternos en ambiente, pues ya se escuchaban los primeros cánticos por parte de las dos aficiones.

En ese momento comenzó la fiesta. El autobús que conducía a los Supporters se planta en la calle de los bares donde paran los Bukaneros (y donde torpemente paramos nosotros) y comienzan a salir personas de dudoso honor de todos lados: punkis aporreando el bus, otros tirando huevos y bengalas… Un show, y nosotros de por medio. La policía llegó porra (reglamentaria) en mano y comenzaron los incidentes que todos habréis podido ver en televisión.

Lo llegamos a pasar realmente mal porque aquella gentuza eran auténtica kale-borroka, pero finalmente y a duras penas se lograron apaciguar los ánimos. En ese momento nos encontramos con la llegada de los otros dos peñistas desplazados, Juan Aguado y Adrián, los cuales no habían visto nada de los incidentes y se quedaron alucinados al ver la que se había montado allí. Peñistas que por cierto, llegaban de pasar un gran finde, uno de ellos con despedida de soltero (suya no) incluida.

Para evitarnos más problemas decidimos entrar en el campo a pesar de que todavía quedaba bastante para el comienzo del partido. Una vez dentro, llegó finalmente el último peñista presente en Vallecas, Curro Cervera, que también tuvo sus mosqueos fuera del campo. Allí el raro fue el que se libró de algún susto.

El ambiente en la grada bética era de diez, muchísima gente desplazada, muchísimos cánticos y mucho apoyo al equipo, que esta vez no dio la cara como se esperaba. Primera parte sosita, buen inicio de la segunda, pero después del gol de Rayo (gracias nuevamente Arzu) nula capacidad de reacción tanto del equipo como de Mel.

Salida tranquila del estadio y planteamiento de la noche madrileña. Cena en el Mc Donalds y parada en casa de un primo de Nacho Ollero para ver posibles lugares de salida. Curro Cervera hizo de guía sin mucho éxito, pues los sitios a los que fuimos o estaban cerrados o pedían mucho dinero para lo poco que ofrecían. Vuelta a la cama bastante más pronto de lo que se preveía.

Lo dicho, para enmarcar el viaje vamos.

Por último, simplemente reseñar que Nacho Ollero volvió a batir su propio récord y hizo la vuelta Madrid-Sevilla en 4 horas, con parada para comer nuevamente incluida. Enhorabuena Alonso.

Nada más que añadir. Un saludo a todos los peñistas presentes en el Teresa Rivero (y que sea así por mucho tiempo) y mucho ánimo para nuestro equipo, este año hay que salir de Segunda por lo civil o por lo criminal. SIEMPRE BETIS.

Rafa Nieto

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VIAJE A GRANADA______________

Como viene sucediendo en todos los viajes multitudinarios (y Granada por cercanía lo era), la organización del viaje comenzó varios días antes del partido, ya que el Granada CF sólo cedió 600 entradas al Real Betis, cifra a todas luces insignificante ante la fuerte demanda de los béticos. La PEÑA, solicitó 2 semanas antes del partido 50 entradas a la Federación de Peñas del Real Betis, que lógicamente, no pudieron ser concedidas en su totalidad. Como ya más de uno se olía el tema, la gente se fue moviendo por su cuenta para conseguirlas y la mayor parte de ellas las conseguimos gracias a que el Granada las puso a la venta en internet. También hubo gente que las pilló a través de colegas que residen en Granada, e incluso uno de nuestros peñistas tuvo que pillarla la noche de antes en un bar de Granada… He de decir que la Federación de Peñas está vez no nos vetó y si nos trató como a una PEÑA más, asignándonos el mismo número de entradas que al resto (cinco).
El grueso de la expedición salió el viernes por la tarde en un coche compuesto por Yago, Antonio Herrera, Julio Caballero, Álvaro Román y un servidor, (Pepelu andaba ya por allí). Tras dejar las maletas y acicalarse un poco, el personal ya se echó a la calle… No tardamos mucho en darnos cuenta de que Granada estaba ya tomada por sevillanos, hasta el punto de que la calle más famosa de Granada, la calle “Navas” parecía una calle cualquiera del centro de Sevilla, un viernes cualquiera por la noche…con un montón de gente y caras conocidas. Tras el clásico tapeo, pasamos al cubateo donde se nos unieron ya varios miembros de Juan Andante. He de decir que los “Juan Andantes” fueron recibidos con la clásica canción “Juan Andanteee, yo soy un Juan andanteee, un bético de anteees, te sigo a todas paaartes…” ante la mirada atónita del personal del pub que no sabía qué coño cantábamos… La noche prosiguió entre cubata y cubata y cántico y cantico en la discoteca MAE WEST (las más grande y famosa de allí) hasta las 6-7 de la mañana.
El sábado la invasión bética era ya total. Había béticos hasta debajo de las piedras. Después de comer algo, nos fuimos juntando unos cuantos (Pepelu, Enrique Plasencia, Espo, y algunos de Juan andante) en un pub del centro que tenía los cubatas a 4 €, donde el ambiente era acojonante, lleno de béticos. Tras arrasar allí, el grueso del grupo nos trasladamos a Canivett, una especie de pub-discoteca de 2 plantas que estaba bastante guapa. Allí, por petición expresa de Alberto de Juan Andante, pusieron el “Stereo Love”… lo que desató la locura entre los béticos allí reunidos (que serían aproximadamente el 60-70% del pub), entre ellos Juan Caballero y su mujer (peñista y padre del también peñista Julio Caballero) que como un bético más, no dudó en cantar y botar con este tema. Por cierto, agradecer a Juan la ronda de cubatas que nos invitó. A partir de ahí el grupo de dispersó, y cada uno fue tomando el camino que pudo…unos siguieron de bares, otros acabaron el Mae West de nuevo, otros petaron y se fueron al hostal y otros en una “house-party” bastante borrachos… Pero sin duda el campeón de la noche fue Yago, quien se presentó en el estadio de Los Cármenes sin dormir y con un litro en la mano. Hay propuestas para que esto valga un punto adicional en la liga de los viajes del año que viene… Tras un par de birras en los aledaños y algunas fotos, nos metimos en el estadio, eso sí, sin pancarta ya que se nos olvidó en el coche…
Del partido hay poco que comentar que no hayáis visto por TV. Mal partido del Betis y mal planteamiento de Mel, que no empañan ni mucho menos el temporadón que está haciendo el equipo. A ver si llegan ya los lesionados que el equipo necesita sangre nueva… De los béticos qué decir. Se me acaban los calificativos para definir a la mejor afición de España. Otra vez hubo una invasión del beticismo, y ya van… Dicen que esta vez había unos 3.500 béticos.
Nada más, saludar a todos los peñistas desplazados: Antonio Herrera, Pepelu, Álvaro Román, Enrique Plasencia, Julio Caballero, Juan Caballero, Juanmi, Joaquín González, Espo, Carlos Cuevas… a los “Juan Andantes” y a todos los béticos desplazados. Un saludo especial para Juan Caballero que sigue firme en la primera posición del trofeo “Donde Vayas” y con un viaje pagado a Gerona… Fede, tienes sucesor!!!
Paco Cuevas

CRÓNICA SALAMANCA - BETIS___________________

Segundo desplazamiento de la temporada donde estuvo presente “La Esquinita”, desplazamiento el cual estaba marcado en rojo por muchos peñistas pero que finalmente entre una cosa y otra tan solo contó con la presencia de cuatro miembros: Fede Barrero, Rafa Nieto, Juan Aguado y Adrián Cardoso por una parte, Andrés Madero por otra y Juan Caballero por otra. Una lástima que el desplazamiento no fuera más numeroso ya que tanto el fin de semana en tierras salmantinas como el resultado del partido fue inmejorable.

Para no perder tiempo, se salió desde la ciudad del Betis sobre las 11 de la mañana, tras parar en Mérida a recoger a otro expedicionario y en Guijuelo para comer, llegamos a nuestro destino sobre las 16:30. Después de soltar las cosas en el hostal donde nos hospedábamos, cuya ubicación era inmejorable a escasos 50 metros de la Plaza Mayor, se compran las entradas para el partido, el alcohol para el fin de semana (cortesía de un peñista que celebraba su cumpleaños) y se recoge a Curro Cervera, peñista madrileño “en espíritu”, que no en aportación económica, que venía en tren desde su ciudad natal. Tras el paseo de rigor para conocer un poco más la ciudad, empiezan a caer las primeras cervezas y los primeros tintos por los bares del centro; refrigerios los cuales iban acompañado de su correspondiente pincho. Vamos, que con cuatro cervezas que te tomaras estabas ya casi cenado.

Caída la noche, nos fuimos de nuevo al hostal para ducharnos y arreglarnos, y he aquí la gran anécdota del viaje. Tras cogernos de primos totalmente el recepcionista y requisarnos las botellas de alcohol (no se podía beber alcohol en el hostal según él pero todo bético que entraba introducía sus botellas sin problemas, mala suerte la nuestra) empezamos a pensar de qué manera podíamos hacernos con las botellas para poder hacer lote en el hostal (lo de hacer lote en la calle no se lleva en Salamanca puesto que además te multa la policía si te ve) y tras contarle un rollo monumental al recepcionista para sacar las botellas, que ni el Pepsi para venderte una entrada cuenta tantas historias, y previo paso de las mismas por la mochila de un bético que también se hospedaba en el mismo hostal que nosotros y que gentilmente se ofreció a ayudarnos, las botellas llegaban a nuestra habitación. Objetivo cumplido. Pero como diría aquel, lo mejor estaba por llegar. Después de bebernos el correspondiente lote, estando ya bastante “tocaítos”, decidimos poner rumbo a las discotecas de Salamanca, y muy listos nosotros, TODOS bajamos por las escaleras del hostal copa en mano (uno de nosotros de hecho salió botella en mano) y diciendo tonterías. Imaginaros la carita que se le quedó al recepcionista cuando nos vio bajar. Gracias a Dios anteriormente se produjo el cambio de turno y el recepcionista no era el mismo, si no, nuestras horas en el hostal habrían estado contadas. De ahí en adelante cada uno que cuente sus batallitas sobre lo que dio de sí la noche salmantina. Pero vamos, por si alguno quiere engañar, quede avisado que las lugareñas eran tela de siesas.

Llegó el sábado y tras levantarnos a duras penas, empezamos a meternos en ambiente verdiblanco ya que por cada sitio que ibas te encontrabas a algún bético. Después de comer nos fuimos a un pub donde estaban los aficionados que más ruido hacían, donde coincidimos los cuatro peñistas e inmortalizamos la foto del viaje. También aprovechamos para hacernos una foto con Ramón Román, periodista de alfinaldelapalmera.com, que estaba en el mismo pub que nosotros junto con otros periodistas sevillanos también desplazados a Salamanca para cubrir la información del Betis suponemos. Tras ello, le perdimos la pista a Juan Aguado y a Adrián, ya que nos fuimos a dar un paseo por la ciudad, con la agradable sorpresa de que mientras hacíamos un descanso, pasó por donde estábamos el autobús del Betis, que acababa de llegar a Salamanca y al que se le recibió como si de la final de Copa del Rey se tratara.

Después de pegarnos un buen homenaje a la hora de cenar, cayó el correspondiente lote, otra vez en el hostal, esta vez sin sobresaltos. Algunos decidieron terminar ahí la noche por eso de que había que madrugar para el partido, otros sí se lanzaron a salir por ahí pero la noche dio bastante poco de sí según cuentan.

Finalmente, llegó el día del partido. Volvimos a levantarnos a duras penas pero a las 11:30 ya estábamos dentro del Helmántico. Del partido qué comentar que no sepáis, gran fútbol desplegado por los nuestros, gran animación por parte bética (reedición incluida del Stereo Love por cortesía del speaker del Salamanca, un crack el tío) y monumental susto por lo de Miguel García, que produjo un espontáneo y emotivo hermanamiento entre la afición bética y la charra. Reseñar que el peñista Juan Aguado, tras verlo en el descanso, seguía con la misma ropa que el sábado a mediodía y con una resaca bastante considerable, así que suponemos que se tuvo que aburrir mucho en Salamanca.

Tras el pitido final del árbitro pusimos rumbo a la ciudad del Betis, con un cansancio encima brutal pero con una sonrisa enorme por el magnífico fin de semana que pasamos en Salamanca y por la victoria del Glorioso. Ojalá el año que viene Betis y Salamanca se vuelvan a ver las caras en primera.

Nada más señores, un saludo para todos los peñistas y en especial para los que estuvieron presentes en Salamanca. ¡¡ Viva el Betis y Viva la peña bética La Esquinita !!